Se realiza entre la semana 11 y 13,6 de gestación. En la misma se evalúa la medición de la translucencia nucal, la presencia de hueso nasal y el flujo sanguíneo en una vena del hígado fetal llamado ductus venoso, y la válvula tricúspide.
La alteración en estos parámetros puede asociarse a un mayor riesgo de anomalías cromosómicas como el Síndrome de Down, otras condiciones genéticas, o problemas cardíacos.
El scan detallado fetal es una ecografía obstétrica a la que se le agrega una
evaluación detallada de los órganos y sistemas fetales. Se realiza entre las semanas 20 y 24 de gestación ya que en ese momento el desarrollo del bebé está completo, y la visualización fetal se encuentra en un momento óptimo.
Se puede asociar a la realización de doppler de arterias uterinas y cervicometría.
Se utiliza en las primeras semanas del embarazo para confirmar la gestación, evaluar la ubicación del saco gestacional, medir al embrión y verificar la presencia de latido cardíaco. Se realiza habitualmente entre la semana 5 y la semana 11 de embarazo.
Se realiza por vía abdominal, desde la semana 8 hasta el final del embarazo para evaluar el crecimiento y desarrollo del bebé, así como también ubicación y maduración placentaria y evaluación de líquido amniótico.
Estudia el flujo sanguíneo entre la placenta, el útero y el bebé. Es útil para controlar el bienestar fetal, especialmente en embarazos de riesgo o cuando hay dudas sobre el crecimiento. Puede solicitarse a partir del segundo trimestre y en controles del tercer trimestre.